SEAMOS MEJORES MAESTROS 10-16 DE FEBRERO
4. Empiece conversaciones
(3 mins.) DE CASA EN CASA. La persona le dice que tiene una
enfermedad crónica (lmd lección
2 punto 5 Sea adaptable. Puede que
la conversación tome un rumbo inesperado. En vez de usar la idea que usted
tenía en mente, esté dispuesto a adaptar el mensaje a lo que le preocupa a la
persona.).
Persona: Gracias,
pero la verdad es que tengo una enfermedad crónica y no me siento muy bien.
Publicador: Lamento
mucho escuchar eso. Debe ser difícil vivir con una condición así. ¿Cómo ha
logrado sobrellevarlo?
Persona: Pues,
trato de hacer lo mejor que puedo, aunque a veces es complicado.
Publicador: Le
entiendo. A muchas personas les da ánimo saber que la Biblia reconoce lo
difícil que es enfrentar enfermedades. De hecho, en Isaías 33:24 hay una
promesa muy bonita. Dice: …¿Se imagina un mundo sin enfermedades?
Persona: Sí, eso
sería maravilloso, pero ¿cómo es posible?
Publicador: La
Biblia muestra que Dios tiene el deseo y el poder para eliminar el sufrimiento
y la enfermedad. Si le interesa, puedo compartirle un breve artículo o un video
que explica más sobre esta esperanza. ¿Le gustaría verlo?
5. Empiece conversaciones
(4 mins.) PREDICACIÓN INFORMAL. Busque la forma de contarle
a la persona algo que aprendió hace poco en una reunión (lmd lección
4 punto 3 No dé la impresión de
sentirse superior. No haga sentir a la persona que usted lo sabe todo y que ella
no sabe nada. Háblele siempre con respeto. ).
👤 Tú: “¡Hola! Qué gusto
volver a verte. ¿Cómo has estado?”
👤 Persona: “Hola, bien,
gracias. ¿Y tú?”
👤 Tú: “Bien también,
gracias. Me acordé de ti el otro día porque en una reunión hablamos de algo que
me pareció muy interesante, y pensé que te podría gustar también.”
👤 Persona: “¿Ah, sí? ¿De
qué se trataba?”
👤 Tú: “Estábamos
comentando cómo muchas veces las preocupaciones pueden hacernos perder de vista
las cosas buenas que tenemos en la vida. A veces, cuando enfrentamos problemas,
parece que solo nos enfocamos en lo negativo y nos olvidamos de todo lo que sí
está saliendo bien. Me hizo pensar en cuántas veces me ha pasado eso. ¿No te ha
pasado a ti también?”
👤 Persona: “Sí, claro. A
veces uno se estresa tanto por las cosas malas que no ve lo bueno.”
👤 Tú: “Exacto. Y algo que
me gustó mucho de la reunión es que hablamos de cómo la gratitud puede
ayudarnos a ver la vida desde otra perspectiva. A veces, incluso en momentos
difíciles, si nos detenemos a pensar en lo que sí tenemos, cambia nuestra
manera de ver las cosas. ¿Tú qué opinas?”
👤 Persona: “Pues sí, creo
que es cierto. A veces solo nos enfocamos en lo que falta y no en lo que
tenemos.”
👤 Tú: “Exactamente. Y me
gustó porque en la Biblia hay un versículo que nos anima a no angustiarnos
tanto por el futuro, sino a vivir el presente con confianza. Es Mateo 6:34,
donde Jesús dijo que cada día tiene sus propios problemas y que no debemos
preocuparnos demasiado por el mañana. Me pareció un consejo muy sabio. ¿Lo
habías escuchado antes?”
👤 Persona: “Sí, creo que
sí, pero nunca lo había pensado de esa manera.”
👤 Tú: “A mí también me
hizo verlo de una forma diferente. Me ayudó a recordar que preocuparse en
exceso no cambia nada, pero sí nos roba la paz. Por eso, desde que lo escuché,
he tratado de enfocarme más en lo bueno. ¿Tú qué haces cuando te sientes preocupado?”
👤 Persona: “Pues intento
distraerme, salir a caminar o hablar con alguien.”
👤 Tú: “Eso es bueno. Yo
también he encontrado que hablar con alguien ayuda mucho. Y otra cosa que me ha
servido es la oración. En la reunión hablaron de cómo expresar nuestras
preocupaciones en oración nos puede dar paz. No sé si alguna vez has orado para
sentirte mejor.”
👤 Persona: “Pues sí, pero
no lo hago muy seguido.”
👤 Tú: “Lo entiendo. A
veces no sabemos qué decir o pensamos que no funcionará. Pero en la reunión nos
recordaron que Dios no espera que usemos palabras complicadas. Solo quiere que
hablemos con sinceridad. Me gustó mucho porque me hizo pensar que no estamos
solos con nuestras preocupaciones. ¿Te gustaría que en otra ocasión te comparta
algunos consejos que aprendí sobre cómo hacer una oración efectiva?”
👤 Persona: “Sí, claro, me
gustaría escucharlos.”
👤 Tú: “¡Genial! La
próxima vez te los comparto. Mientras tanto, ojalá este pensamiento te ayude a
ver las cosas con más calma cuando tengas un día difícil.”
6. Discurso
(5 mins.) w19.03 10
párrs. 7-11. Título: Escuche a Jesús: Predique las buenas noticias. Durante
el discurso, use la imagen (th lección
14 RESUMEN: Ayude a sus oyentes a
seguir el hilo de su discurso y deje claro cómo se relacionan los puntos
principales con el tema y el objetivo de su presentación. ).
Escuche a Jesús y Predique las Buenas Noticias
Cuando Jesús estuvo en la Tierra, Jehová dejó claro que
debíamos escucharlo. Un ejemplo poderoso de esto fue la transfiguración. Jesús
llevó a Pedro, Santiago y Juan a una montaña alta, donde su apariencia cambió y
resplandeció con una luz impresionante.
Haciendo memoria de este suceso, aparecieron dos figuras
representando a Moisés y Elías, y hablaron con Jesús sobre su futura muerte y
resurrección. Los apóstoles, aunque estaban cansados, vieron la visión
claramente cuando se despertaron por completo.
Como acto final escuchamos
la voz de Jehová “Este es mi Hijo, el amado, a quien he aprobado. Escúchenlo”.
Con estas palabras, Jehová confirmó que Jesús era el Mesías y que debíamos
prestar atención a sus enseñanzas. Esta visión fortalecía no solo a Jesús para
lo que vendría, sino también a sus seguidores, preparándolos para los retos que
enfrentarían.
El apóstol Pedro recordó esta visión incluso treinta años
después, lo que nos demuestra cuán importante fue para él. Nosotros también
debemos reflexionar en su significado y lo que nos enseña hoy.
Jesús nos dejó muchas enseñanzas valiosas. Nos instruyó a
predicar las buenas noticias del Reino y a estar siempre alerta. También nos
motivó a esforzarnos al máximo en nuestro servicio a Jehová y a no rendirnos
ante las dificultades. Su consejo de amarnos unos a otros y permanecer unidos
sigue siendo fundamental para nuestra vida diaria (Juan 15:10, 12, 13).
Jesús también dijo Juan 18:37 Esto significa que demostramos
ser sus seguidores cuando aplicamos sus enseñanzas en la vida diaria. Por
ejemplo, al perdonarnos unos a otros con generosidad y paciencia y al predicar con entusiasmo en todo momento,
sin importar las circunstancias.
Jesús también mencionó que sus ovejas escuchan su voz (Juan
10:27). Esto implica no solo oír sus palabras, sino también obedecerlas. No
debemos permitir que “las inquietudes de la vida” nos distraigan de nuestra
misión espiritual. Debemos darle prioridad a la voluntad de Jehová, incluso
cuando enfrentemos dificultades. Muchos de nuestros hermanos han demostrado
esta fidelidad a pesar de sufrir oposición, dificultades económicas o desastres
naturales.
Jesús nos asegura que Jehová ama a quienes lo obedecen. “El
que tiene mis mandamientos y los observa, ese es el que me ama. A su vez, el
que me ama será amado por mi Padre”. Esta es una garantía maravillosa que nos
motiva a seguir escuchando y obedeciendo a Jesús.
Jehová nos dio un consejo claro: “Escuchen a mi Hijo” y una
manera es haciendo lo que observamos en
la imagen . Pongámoslo en práctica predicando las buenas noticias con
entusiasmo y aplicando sus enseñanzas en nuestra vida diaria. Así, demostramos
que realmente escuchamos a Jesús.