ARTÍCULO DE ESTUDIO 49 SEMANA DEL 10 AL 16 DE FEBRERO
CANCIÓN 147 Dios nos promete la vida eterna
Qué hay que hacer para conseguir vida eterna
“Que todo el que reconozca al Hijo y demuestre fe en él
tenga vida eterna” (JUAN 6:40).
TEMA
Cómo beneficia el sacrificio de Jesucristo tanto a los
ungidos como a las otras ovejas.
1. ¿Qué les parece a algunas personas la idea de vivir para
siempre?
Respuesta: A muchos les cuesta creer que sea posible vivir
para siempre. Algunos lo ven como algo irreal o incluso como una idea poco
atractiva porque piensan en los problemas de la vejez.
2. ¿Qué dice el capítulo 6 de Juan sobre la vida eterna?
(Juan 6:39, 40).
Respuesta: Jesús hizo un milagro al alimentar a una
multitud, pero al día siguiente les enseñó algo aún más impresionante: que los
humanos pueden resucitar y vivir para siempre si tienen fe en él. Esto nos da
esperanza de volver a ver a nuestros seres queridos que han muerto.
3. Según Juan 6:51, ¿qué enseñó Jesús sobre sí mismo?
Respuesta: Jesús comparó su papel con el del maná que Dios
les dio a los israelitas en el desierto. Aunque el maná los alimentó, no les
dio vida eterna. En cambio, él sí puede hacerlo porque es "el pan vivo que
bajó del cielo". Es decir, gracias a su sacrificio, la humanidad tiene la
oportunidad de vivir para siempre.
4. ¿Por qué se escandalizaron algunos al oír lo que dijo
Jesús?
Respuesta: Porque tomaron sus palabras de forma literal y
pensaron que estaba diciendo algo extraño, como si les pidiera que comieran su
carne. No entendieron que hablaba en sentido simbólico sobre la importancia de
su sacrificio.
5. ¿Por qué sabemos que Jesús no le estaba pidiendo a la
gente que bebiera su sangre literal?
Respuesta: Porque desde tiempos antiguos, Dios había
prohibido el consumo de sangre. Jesús respetaba esa norma, por lo que sus
palabras no eran literales. Más bien, estaba enseñando que su sacrificio es
esencial para obtener la vida eterna.
6. ¿Qué más nos ayuda a entender que Jesús hablaba en sentido
figurado cuando dijo que había que comer su carne y beber su sangre?
Respuesta: Jesús usaba con frecuencia comparaciones para
enseñar. Por ejemplo, a la samaritana le habló de un agua que daría vida
eterna, pero obviamente no era un agua literal. De la misma manera, cuando
habló de comer su carne y beber su sangre, no se refería a hacerlo
literalmente, sino a aceptar su sacrificio como algo esencial para la vida
eterna.
DIFERENCIAS ENTRE DOS OCASIONES
7. ¿Qué afirman algunos sobre lo que Jesús dijo en Juan
6:53?
Respuesta: Algunas religiones creen que cuando Jesús habló
de comer su carne y beber su sangre en Juan 6:53, estaba preparando el camino
para la Cena del Señor. Por eso dicen que todos los que asisten a esta
celebración deben comer el pan y beber el vino. Sin embargo, veremos que hay
varias diferencias entre ambas ocasiones.
8. ¿Cuáles son algunas diferencias entre estas dos
ocasiones? (Vea también las imágenes).
Respuesta: Hay dos diferencias importantes. Primero, Jesús
habló en Juan 6:53 un año antes de instituir la Cena del Señor, y lo hizo ante
una multitud que no entendía realmente su mensaje. Segundo, en Galilea muchos
lo seguían solo por los milagros, pero cuando dijo algo difícil de entender, lo
abandonaron. En cambio, cuando estableció la Cena del Señor, estaba con sus
apóstoles fieles, quienes sí creían en él aunque no comprendieran todo. Estas
diferencias muestran que Juan 6:53 no tiene relación con la Cena del Señor
LAS PALABRAS DE JESÚS Y USTED
9. ¿A quiénes aplican las palabras que dijo Jesús en la
Cena del Señor?
Respuesta: Jesús explicó que el pan representaba su cuerpo y
el vino su sangre, y que esto tenía que ver con un nuevo pacto. Pero este pacto
no era para toda la humanidad, sino para aquellos que gobernarían con él en el
cielo. Sus apóstoles no entendieron completamente esto en ese momento, pero
luego fueron ungidos con espíritu santo y se les aclaró su papel en el Reino de
Dios.
10. ¿Cuál es otra diferencia entre lo que Jesús dijo en
Galilea y lo que dijo durante la Cena del Señor? (Vea también la imagen).
Respuesta: En la Cena del Señor, Jesús se dirigió a su
“rebaño pequeño”, aquellos que gobernarían con él en el cielo. A ellos les dijo
que debían comer el pan y beber el vino. En cambio, cuando habló en Galilea,
tenía en mente a un grupo más amplio, a quienes les estaba enseñando la
importancia de su sacrificio para la vida eterna.
11. ¿Cómo sabemos que la bendición de la que habló Jesús en
Galilea no era para un grupo limitado de personas?
Respuesta: Cuando Jesús habló en Galilea en el año 32, se
dirigía a personas que solo buscaban alimento físico. Sin embargo, él les habló
de algo mucho más importante: la posibilidad de obtener vida eterna. También
explicó que los que murieran podrían resucitar y vivir para siempre. No estaba
ofreciendo una bendición para unos pocos, sino para todos los que desearan
recibirla. Lo dejó claro cuando dijo: "Si alguien come de este pan, vivirá
para siempre"
12. ¿Qué hace falta para recibir la vida eterna de la que
habló Jesús en Galilea?
Respuesta: Jesús no
enseñó que todas las personas recibirían automáticamente la bendición de la
vida eterna. Para obtenerla, era necesario “comer del pan”, es decir, demostrar
fe. Algunos en la multitud inicialmente creyeron en Jesús, pero después lo
abandonaron. Esto demuestra que la fe verdadera no es solo aceptar a Jesús como
Salvador, sino seguirlo y confiar en él constantemente.
13. ¿Qué hacía falta para ser un verdadero discípulo de
Jesús?
Respuesta: Muchos seguían a Jesús solo por los beneficios
materiales, como la comida gratis o las curaciones milagrosas. Sin embargo, ser
su verdadero discípulo requería más que eso. Jesús no vino solo a satisfacer
necesidades físicas; sus seguidores debían aceptar y obedecer todas sus
enseñanzas, no solo lo que les convenía.
14. ¿Qué tenemos que hacer para beneficiarnos de la carne y
la sangre de Jesús?
Respuesta: Jesús enfatizó que era necesario tener fe en su
sacrificio para obtener vida eterna. En su tiempo, los judíos necesitaban creer
en el valor de su carne y sangre entregadas por la humanidad. Hoy en día, sigue
siendo esencial demostrar fe en su sacrificio para beneficiarnos de él, ya que
esta bendición está disponible para muchas personas.
15, 16. ¿Qué beneficios nos recuerda el capítulo 6 de Juan?
Respuesta: El capítulo 6 de Juan nos recuerda el gran amor
de Jesús por las personas. Aunque las “otras ovejas” no participan del pan y el
vino en la Cena del Señor, sí reciben beneficios de su sacrificio al demostrar
fe en él. Por otro lado, quienes comen del pan y beben del vino indican que
forman parte del nuevo pacto y tienen la esperanza celestial. En resumen, este
capítulo es valioso para todos, ya que resalta la importancia de tener fe en
Jesús para alcanzar la vida eterna.
¿CÓMO CONTESTARÍA?
¿Qué debemos hacer para vivir para siempre?
Debemos demostrar fe en Jesús y en el sacrificio que hizo
por la humanidad. Esto implica no solo creer en él, sino también obedecer sus
enseñanzas y seguir su ejemplo en nuestra vida diaria.
¿Cuáles son algunas diferencias entre lo que Jesús dijo en
el año 32 y lo que dijo en la Cena del Señor, en el 33?
En el año 32, Jesús habló en Galilea sobre el “pan de la
vida”, refiriéndose a su carne y su sangre como el medio para obtener la vida
eterna. En cambio, en la Cena del Señor, en el 33, estableció un pacto con sus
discípulos más cercanos y usó el pan y el vino como símbolos de su sacrificio,
indicando que quienes participaran serían parte del nuevo pacto y herederos del
Reino celestial.
Aunque las otras ovejas no deben comer del pan ni beber del
vino de la Conmemoración, ¿qué maravillosa esperanza tienen según el capítulo 6
de Juan?
Las otras ovejas pueden beneficiarse del sacrificio de Jesús
al demostrar fe en él. Gracias a esto, tienen la esperanza de vivir para
siempre en la Tierra bajo el Reino de Dios, disfrutando de una vida plena y en
paz, tal como Dios lo ha prometido.