NUESTRA VIDA CRISTIANA 27 de febrero al 02 de marzo
Canción 96
7. ¿Eres un cazatesoros?
¿Qué te parece la idea de ir a buscar un tesoro escondido?
¿Te gusta? Pues te encantará saber que la Biblia te invita a ti, joven, a ir a
la búsqueda del tesoro más valioso del universo: el conocimiento de Dios (Pr
2:4, 5). Podrás encontrarlo si eres constante leyendo la Biblia y “excavas”
para profundizar en los relatos. ¡Disfrutarás mucho y aprenderás un montón!
¿Qué preguntas te puedes hacer cuando estés leyendo la
Biblia? Respuesta:
¿Quién escribió el pasaje?
¿Cuándo lo escribió?
¿A quién iba dirigido?
¿Cuáles eran las circunstancias?
¿Qué ocurrió antes y después?
¿Cómo se sintieron las personas que aparecen en el pasaje?
¿Qué cualidades mostraron y por qué debo imitarlas?
¿Qué defectos tuvieron y por qué debo evitarlos?
¿Qué herramientas puedes usar para encontrar las respuestas?
Respuesta: Sí, podemos tomar en cuenta el contexto de los
textos y valernos de publicaciones bíblicas como Toda Escritura, los índices o
la Biblioteca en Línea. Estas herramientas nos ayudan a comprender las circunstancias
en las que se escribió un pasaje y así entender mejor su significado.
Ponga el VIDEO Aprende de los amigos de Jehová: Abel.
Expandir comentarios:
Lea Génesis 4:2-4 y Hebreos 11:4. Luego pregunte:
¿Qué hizo Abel para demostrar que era amigo de Jehová?
Abel le ofreció a Jehová lo mejor que tenía, una ofrenda de
gran valor y con la actitud correcta, mostrando su amor y respeto por Dios.
Siempre trató de hacer lo que era bueno, apreciando lo que Jehová había creado
en la naturaleza. Su obediencia y sinceridad reflejaron su deseo de agradar a
Dios, lo que lo distinguió de su hermano Caín.
¿Qué hizo Abel para tener más fe en Jehová?
Abel buscó aprender de otros seres que también confiaban en
Jehová. Por ejemplo, pudo haber observado a los querubines que custodiaban la
entrada al jardín de Edén, recordándole que Jehová cumpliría su palabra.
Además, conocía la promesa de Jehová de restaurar el paraíso y tenía plena
confianza en que Dios haría lo que había dicho. Su fe se fortaleció al
reconocer la soberanía de Jehová y al actuar en conformidad con su voluntad.
¿Qué puedes hacer tú para tener más fe?
Puedo fortalecer mi fe con el estudio profundo de la Biblia,
lo que me permitirá conocer mejor a Jehová y su propósito. Al igual que Abel,
puedo aprender de otros siervos de Dios que mostraron fe en el pasado y aplicar
sus ejemplos en mi vida. Además, la oración sincera y la aplicación de los
principios bíblicos en mi día a día me ayudarán a acercarme más a Jehová y a
fortalecer mi confianza en sus promesas.