Busquemos perlas escondidas del 14 al 20 de octubre
Salmo 96:1. ¿A qué
suele referirse la expresión “una canción nueva”?
La expresión "una canción nueva" en la Biblia
generalmente se refiere a un cántico que celebra un hecho nuevo relacionado con
la soberanía de Jehová. Esta idea se menciona no solo en los Salmos, sino
también en los escritos de Isaías y en las visiones del apóstol Juan en el
libro de Revelación (Apocalipsis).
En estos contextos, la "canción nueva" se entona
cuando Jehová realiza un acto destacado de su soberanía, como se proclama en el
Salmo 96:10: "Jehová mismo ha llegado a ser rey". Este cántico
expresa gozo por los eventos nuevos vinculados con la extensión del gobierno de
Jehová, que tiene implicaciones tanto para el cielo como para la tierra además
La "canción nueva" refleja la alegría y el agradecimiento por el
papel activo de Jehová en la historia, que merece una expresión renovada de
alabanza.
¿Qué perlas espirituales ha encontrado en la lectura bíblica
de esta semana?
La lección que podemos extraer de Salmo 96:2 es clara: no
debemos dejar de hablar de Jehová. Esto nos enseña que es importante proclamar
continuamente las buenas nuevas sobre Jehová y su reino. podemos experimentar
diferentes métodos de predicación, como ir de casa en casa, hablar
informalmente con las personas mientras realizamos nuestras labores diarias, o
incluso usar cartas y llamadas telefónicas. Cada uno de estos métodos nos
permite seguir compartiendo el mensaje de salvación y cumplir con nuestra
responsabilidad de hablar de Jehová en toda oportunidad que tengamos.
La lección del Salmo 96:3 nos enseña la importancia de
ayudar a las personas a alabar a Jehová por sus maravillosas obras. Esto nos
anima a dirigir la atención de las personas hacia las creaciones de Jehová que
vemos a nuestro alrededor: la tierra, los animales, y el mundo que nos rodea.
Todo lo que existe es prueba de su poder y sabiduría. Al enseñar a las personas
a reconocer y apreciar estas obras, podemos ayudarlas a ver la mano de Jehová
en la creación, lo que debería motivarlas a alabarlo y honrarlo por su
grandeza.
La lección del Salmo 96:4 nos enseña que debemos alabar a
Jehová como el único Dios verdadero. aunque existen otros "dioses" en
el mundo, como las riquezas o el poder, que ofrecen cierta protección y
seguridad a quienes los poseen, ninguno de ellos se compara con Jehová, Jehová
no solo es el Creador de todas las cosas, sino que también es el único que
tiene verdadero poder y control sobre todo. Las riquezas y otros dioses pueden
ofrecer una sensación temporal de seguridad, pero no pueden igualar la
grandeza, el amor, ni la justicia de Jehová. Por eso, solo Él merece nuestra
completa devoción y alabanza.
La lección del Salmo 96:13 nos enseña que Jehová es el juez
justo de toda la tierra. este pasaje nos recuerda que Jehová, como el soberano
de toda la creación, intervendrá para poner fin a la injusticia y traer un
juicio perfecto. Su juicio no estará influenciado por parcialidad, corrupción o
imperfección humana, sino que se basará en la verdad y la justicia. Esto nos da
confianza de que en el futuro, todas las cosas se corregirán y el mundo estará
gobernado con rectitud. Nos motiva a vivir de acuerdo con sus normas y a tener
fe en que su justicia prevalecerá
La lección del Salmo 97:2 nos enseña que, aunque Jehová es
infinitamente poderoso, no abusa de su poder. Este pasaje destaca que, aunque
Jehová está rodeado de un poder inmenso y majestuoso, el fundamento de su trono
es la justicia y el derecho. Esto significa que su poder siempre está guiado
por principios de justicia, imparcialidad y bondad. Jehová no es un tirano que
impone su voluntad arbitrariamente, sino que utiliza su poder de manera justa y
compasiva. Como siervos suyos, podemos confiar plenamente en que su poder
siempre se utiliza para el bien y nunca para la opresión.
Salmos 96:8 nos enseña que debemos traer ofrendas a Dios y
adorarlo con reverencia. Esto simboliza la importancia de ofrecer algo valioso
de nosotros mismos como muestra de gratitud y devoción, y por ejemplo, en el
contexto de ser parte del pueblo de Dios, este versículo nos enseña que la
verdadera adoración implica un compromiso y sacrificio personal, lo que nos
acerca a Dios y nos permite entrar en su pueblo con un corazón sincero y
dispuesto.