Busquemos perlas escondidas Semana del 01 al 07 de abril 

Sl 23:3. ¿Qué son los “senderos de justicia”, y qué impedirá que nos salgamos de ellos? (w11 15/2 24 párrs. 1-3).

En Salmos 23:3, los "senderos de justicia" se refieren a los caminos rectos y correctos trazados por Dios, que están en línea con Su justicia divina. Para mantenernos en estos senderos y no desviarnos, es crucial valernos de la Palabra de Dios y su espíritu, así como seguir el ejemplo de Jesús, quien amaba la rectitud . Al conocer y amar la justicia de Dios, estaremos más cerca de Él y seremos guiados por sus normas morales, lo que nos ayudará a permanecer en los senderos de justicia .

¿Qué perlas espirituales ha encontrado en la lectura bíblica de esta semana?

El Salmo 23:1-4 nos enseña sobre la relación cercana y protectora que Jehová tiene con sus siervos. En estos versículos, se destaca que Jehová es nuestro Pastor, lo que implica cuidado, provisión, guía y protección constante para aquellos que le siguen. Además, se menciona que Él nos lleva a lugares de descanso, restaura nuestras fuerzas, nos guía por senderos de justicia y nos consuela en momentos de dificultad o peligro.

 En el Salmo 23:2, aprendemos que Jehová, nuestro Pastor, nos lleva a lugares de descanso y nos hace descansar en verdes praderas. Esta imagen de paz, tranquilidad y provisión refleja el cuidado amoroso y la preocupación de Dios por nuestro bienestar. Nos enseña que en medio de las circunstancias difíciles de la vida, podemos encontrar descanso y renovación en la presencia y el cuidado de Dios, quien nos provee todo lo que necesitamos para nuestra vida espiritual y emocional.

En el Salmo 23:6, aprendemos que la bondad y la misericordia de Jehová nos seguirán todos los días de nuestra vida, y que habitaremos en la casa de Jehová por largos días. Esta afirmación nos enseña sobre la fidelidad inquebrantable de Dios hacia sus seguidores, su constante amor y cuidado que nos acompañan a lo largo de nuestra vida. Además, nos brinda la esperanza de una vida eterna en la presencia de Dios, donde podremos disfrutar de su compañía y bendiciones para siempre.

El Salmo 24:1-2 nos enseña que Jehová es el Soberano y Creador de todo el universo. Se destaca que la tierra y todo lo que hay en ella pertenecen a Jehová, ya que Él la fundó sobre los mares y la estableció sobre los ríos. Estos versículos nos muestran la grandeza, el poder y la autoridad de Dios sobre toda la creación, recordándonos que Él es el dueño supremo de todo lo que existe.

El Salmo 24:3 y 4 nos invita a reflexionar sobre quién puede subir al monte de Jehová y quién puede estar en su lugar santo, la pregunta que aparece en el versículo 3 nos lleva a considerar la importancia de la pureza, la integridad en nuestra relación con Dios. Nos enseña que aquellos que desean acercarse a Dios deben hacerlo con un corazón limpio, una vida recta y una actitud de respeto y adoración hacia Él.

El Salmo 24:6 al 10 nos enseña que aquellos que buscan a Dios y le siguen con fidelidad recibirán bendiciones y justicia de parte de Él. Nos muestra que la búsqueda sincera de Dios y la obediencia a sus mandamientos son recompensadas con su favor y protección. Este versículo nos anima a confiar en la justicia y la bondad de Dios, sabiendo que Él recompensa a aquellos que le buscan con sinceridad y le siguen con fidelidad.

En el Salmo 25:1-2, el salmista expresa su confianza en Dios y su dependencia de Él. Nos enseña la importancia de acudir a Dios en busca de ayuda, dirección y protección. El salmista reconoce a Dios como su refugio y pide que no sea avergonzado, confiando en la fidelidad y la justicia de Dios, así que estos versículos nos recuerdan la necesidad de confiar en Dios en todo momento, de buscar su guía y su fortaleza en medio de las dificultades y de depositar nuestra confianza en su amor y su poder para sostenernos y protegernos.

En el Salmo 25:4, el salmista expresa su deseo de que Dios le muestre sus caminos y le enseñe sus sendas. Este versículo nos enseña la importancia de buscar la dirección y la guía de Dios en nuestra vida. Nos anima a confiar en Dios para que nos enseñe el camino que debemos seguir, para que podamos caminar en sus sendas de justicia y fidelidad, así que aprendemos que es fundamental buscar la voluntad de Dios y permitir que Él nos dirija en nuestro caminar diario, confiando en su sabiduría y su amor para guiarnos por el camino correcto.

En el Salmo 25:6, el salmista reconoce a Jehová como un Dios misericordioso, lento para la ira y grande en amor y verdad. Este versículo nos enseña sobre la naturaleza compasiva y amorosa de Dios. Nos muestra que Jehová es un Dios que perdona, que muestra compasión y que es paciente con sus hijos. Aprendemos que podemos acudir a Dios en busca de perdón y misericordia, confiando en su amor inagotable y en su fidelidad para con nosotros.

En el Salmo 25:7, el salmista reconoce su pecado y su necesidad de perdón, este versículo nos enseña sobre la importancia del arrepentimiento sincero y la confianza en la misericordia de Dios. Aprendemos que debemos reconocer nuestros pecados, arrepentirnos de corazón y acudir a Dios en busca de perdón, confiando en su amor y su compasión para restaurarnos.

Salmo 25:14 nos enseña sobre la importancia del temor reverente a Dios y la cercanía que podemos tener con Él a través de una relación de temor sano y obediencia. Aprendemos que aquellos que temen a Dios y le obedecen pueden disfrutar de una amistad íntima con Él, en la que Dios les revela su voluntad y les hace conocer sus promesas y pactos.

 En el Salmo 25:17, el salmista expresa su angustia y aflicción, por lo que este versículo nos enseña sobre la realidad de enfrentar dificultades y aflicciones en la vida, y la necesidad de acudir a Dios en busca de consuelo y ayuda. Aprendemos que es natural experimentar momentos de angustia y aflicción, pero también aprendemos que podemos confiar en Dios para que nos saque de esas situaciones difíciles.