LA ATALAYA DEL 15 al 21 de septiembre

 

ARTÍCULO DE ESTUDIO 28 LA ATALAYA DEL
 15 al 21 de septiembre 
  
Cómo pedir consejo



1. ¿Cómo podemos tomar buenas decisiones y lograr que nuestros planes salgan bien?

Podemos lograrlo si pedimos consejo y no confiamos solo en nuestro propio criterio, tal como enseña la Biblia

 

2. ¿Qué nos ha prometido Jehová?

Jehová nos asegura que nos dará el consejo que necesitamos y que estará pendiente de nosotros para ayudarnos a aplicarlo

 

3. ¿Qué preguntas responderemos en este artículo?

Este artículo responderá cuatro preguntas:

 

¿Qué cualidades necesito para aprovechar los consejos?

 

¿Quién puede darme buenos consejos?

 

¿Por qué es importante tener una mente abierta?

 

¿Por qué no debo dejar que otros decidan por mí?

 

4. ¿Qué cualidades necesitamos si queremos beneficiarnos de los consejos que recibamos?

Debemos ser humildes y modestos, reconociendo que otros con más experiencia pueden ayudarnos. La humildad abre nuestro corazón a los consejos de la Biblia, mientras que el orgullo nos impediría aprovecharlos.

 

5. ¿Por qué podría haberse vuelto orgulloso el rey David?

Porque tenía muchas razones para sentirse superior: era un músico reconocido, Jehová lo había escogido como rey y le había dado su espíritu, además de que había derrotado a grandes enemigos como Goliat y tenía el apoyo del pueblo. Aun así, no fue orgulloso, sino humilde.

6. ¿Cómo sabemos que David aceptaba con gusto que le dieran consejos? (Vea también la imagen).

Encontrar respuesta en el párrafo en propias palabras:

6 Cuando David ya era rey, se rodeó de hombres de confianza para que le dieran consejos (1 Crón. 27:32-34). Y no es de extrañar, porque él siempre había estado dispuesto a escuchar buenos consejos, sin importar que se los diera un hombre o una mujer. Eso fue lo que pasó con Abigaíl, la esposa de un hombre arrogante, egoísta y desagradecido llamado Nabal. David fue humilde e hizo caso de lo que ella le dijo, y gracias a eso evitó cometer un terrible error (1 Sam. 25:2, 3, 21-25, 32-34).

 

 

7. ¿Qué lecciones nos enseña el ejemplo de David? (Eclesiastés 4:13; vea también las imágenes).

Encontrar respuesta en el párrafo en propias palabras:

7 ¿Qué lecciones nos enseña el ejemplo de David? Por un lado, que aunque tengamos mucho talento y cierta autoridad no debemos pensar que ya lo sabemos todo y que no necesitamos que nadie nos aconseje. Por otro lado, tenemos que estar dispuestos a escuchar cualquier buen consejo, sin importar de quién venga (lea Eclesiastés 4:13). Así será más probable que no cometamos graves errores que nos hagan daño a nosotros o a otras personas.

 

 

“¿QUIÉN PUEDE DARME BUENOS CONSEJOS?”

8. ¿Por qué hizo bien David en buscar el consejo de Jonatán?

Encontrar respuesta en el párrafo en propias palabras:

8 Veamos otra lección que nos enseña el ejemplo de David. Él escuchaba los consejos de aquellos que 1) tenían una buena relación con Jehová y 2) entendían bien su situación. Por ejemplo, cuando quiso saber si podría hacer las paces con el rey Saúl, buscó el consejo de Jonatán, el hijo de Saúl. ¿Por qué era Jonatán la persona más indicada en este caso? Porque tenía una buena relación con Jehová y además conocía muy bien a Saúl (1 Sam. 20:9-13). ¿Cómo podemos imitar el ejemplo de David?

 

9. Si necesitamos un consejo, ¿a quién se lo debemos pedir? Ponga un ejemplo (Proverbios 13:20).

Encontrar respuesta en el párrafo en propias palabras:

9 Cuando necesitemos un consejo sobre algo, es bueno que se lo pidamos a alguien que 1) tenga una buena relación con Jehová y 2) tenga experiencia en ese tema (lea Proverbios 13:20).a Por ejemplo, imaginemos que un hermano joven desea casarse. ¿A quién podría pedirle consejo? Un amigo soltero puede darle consejos útiles si están basados en los principios bíblicos. Pero el joven seguramente reciba consejos más prácticos y específicos si le pregunta a una pareja espiritual, que lo conozca bien y que lleve felizmente casada un tiempo.

 

10. ¿Qué veremos ahora?

Encontrar respuesta en el párrafo en propias palabras:

10 Ya hemos analizado qué dos cualidades necesitamos y quién puede darnos buenos consejos. Veamos ahora por qué debemos tener una mente abierta y si es buena idea pedirles a los demás que decidan por nosotros.

 

“¿POR QUÉ ES BUENO QUE TENGA UNA MENTE ABIERTA?”

11, 12. a) ¿Qué no deberíamos hacer?

No debemos pedir consejo solo para que alguien confirme lo que ya decidimos. Eso muestra falta de una mente abierta.

 

b) ¿Qué hizo Rehoboam cuando tuvo que tomar una decisión importante?

Al principio pidió consejo a los ancianos, pero lo rechazó y prefirió escuchar a sus amigos jóvenes, quienes le dijeron lo que quería oír. Como resultado, su decisión provocó una rebelión y trajo problemas a su reinado.

 

13. ¿Qué nos ayudará a saber si tenemos una mente abierta?

Nos ayudará pensar: “Si el consejo que recibo no es lo que esperaba, ¿estoy dispuesto a aceptarlo de todos modos?”. Eso muestra si realmente buscamos ayuda o solo que nos den la razón.

 

14. ¿Qué no debemos olvidar? Ponga un ejemplo.

Debemos recordar que nuestro corazón puede engañarnos. Por ejemplo, alguien recibe una oferta de trabajo con buen sueldo, pero que lo alejaría mucho de su familia. Pide consejo, pero rechaza lo que no le gusta hasta que alguien le dice lo que él quería oír. En realidad, no estaba buscando guía, sino confirmar su decisión.

 

15. ¿Qué no debemos hacer, y por qué?

No debemos pedir que otros decidan por nosotros ni imitar lo que hacen los demás sin pensar. Jehová quiere que cada cristiano use la Biblia y el consejo maduro, pero que al final tome su propia decisión, porque cada uno rendirá cuentas ante Él.

 

16. ¿Qué decisión tenían que tomar los cristianos de Corinto? (1 Corintios 8:7; 10:25, 26).

Tenían que decidir si comer o no la carne que quizá había sido ofrecida a ídolos. Algunos comían sin problema y otros preferían no hacerlo por conciencia. Era una decisión personal, y Pablo recalcó que nadie debía decidir por los demás, ya que cada uno respondería ante Dios.

17. ¿Qué puede pasar si solo copiamos lo que otros hacen? Ponga un ejemplo.

Si solo imitamos lo que otros hacen, nuestra conciencia se debilita porque no la estamos entrenando. Por ejemplo, con el tema de las fracciones de la sangre, cada cristiano debe investigar y analizar los principios bíblicos para tomar su propia decisión. Si solo copiamos a otros, no estaríamos fortaleciendo nuestra fe ni nuestra responsabilidad cristiana.

 

18. ¿Qué ha hecho Jehová por nosotros?

Jehová nos ha dado la dignidad de tomar decisiones propias, y nos apoya con su Palabra y con hermanos maduros que nos orientan en cómo aplicar los principios bíblicos. Así muestra cuánto confía en nosotros como un buen Padre.

 

19. ¿Cómo podemos hacer feliz a Jehová?

Lo hacemos cuando seguimos creciendo espiritualmente, buscamos consejo, y tomamos decisiones maduras que le dan honra. Eso alegra a nuestro Padre, igual que a los padres humanos les alegra ver crecer bien a sus hijos.

¿QUÉ RESPONDERÍA?

¿Por qué debemos ser humildes y modestos?

Porque solo con humildad aceptamos consejos, reconocemos que otros tienen más experiencia y así permitimos que Jehová nos guíe mediante su Palabra y su pueblo.

 

¿Por qué debemos tener una mente abierta?

Porque de nada sirve pedir consejo si en el fondo ya decidimos lo que queremos. Una mente abierta nos ayuda a aceptar lo que tal vez no queremos oír, pero que realmente necesitamos.

 

¿Por qué no deberíamos pedirles a los demás que decidan por nosotros?

Porque Jehová espera que cada cristiano asuma su responsabilidad, use su conciencia entrenada por la Biblia y tome sus propias decisiones, ya que cada uno dará cuentas a Él.

Entradas populares